lunes, diciembre 11, 2006

Comentario 11/12/2006

Muere Pinochet y la lucha continúa
Camilo Ná
Murió Augusto Pinochet y con él se fueron, simbólicamente, miles de fantasmas que rondaban Chile en las noches, llenando todo de rencor y odio, de miedo y angustia. Murió y se fue, con él, una lágrima siempre presente. Pero no se ausentan ni se olvidan los miles de asesinatos, la guerra sucia, la represión y la humillación de un pueblo heroico que creyó conquistar la democracia y un sistema político y económico mucho más justo e igualitario. No se fueron con Pinochet las ansias de seguir luchando ni los muertos se borraron. Ahí siguen, aunque el dictador no esté, ellos están ahí, esperando que la sociedad chilena los reviva en los ideales y en la ideología. Canta, sí, canta Víctor Jara, y junto con él miles de desaparecidos y de torturados. Hoy es día de canto y poesía: ha muerto el dictador, pero aún, en Chile y en toda América Latina, existe una labor ingente: hacer patrias más justas y sin las abismales diferencias sociales. Sí, murió Pinochet, pero nosotros..., nosotros debemos seguir luchando, allá, en Chile, y en toda América Latina, para que no vuelva a darse una dictadura, para que la derecha no se sienta dueña de la democracia y para que los fraudes (como el cometido por Felipe Calderón), no queden impunes. Y también debemos tener presente que los aciagos años vividos con el dictador chileno están reviviendo aquí, en México: asesinatos y secuestros, guerra sucia y tortura. Como Pinochet, Calderón, a través de un golpe de estado moderno, robó la presidencia de la república. No permitamos que surja un nuevo dictador (chaparro, peloncito y de lentes). Defendamos los derechos humanos de los oaxaqueños y no cedamos en el movimiento (desde distintas izquierdas) de resistencia civil pacífica en contra del presidente espurio. No queremos dictador, queremos un presidente legítimo, con el apoyo de la sociedad y que trabaje por, para y en beneficio del pueblo.